Del optimismo de los gobiernos occidentales en un triunfo de Kiev, mostrado en parte de 2023, no quedó absolutamente nada, consideró el editorialista Robert Clark, del diario británico The Telegraph.
Entre las principales causas de la citada decepción el rotativo cita el fracaso de la contraofensiva ucraniana, lanzada el pasado 4 de junio, y el éxito de la economía de Rusia, pese a la aplicación contra ella de más de 17 mil medidas punitivas unilaterales.
De acuerdo con el ministerio ruso de Defensa, en la contraofensiva perecieron más de 150 mil militares ucranianos, mientras que desde febrero de 2022 fueron destruidos 565 aviones, 263 helicópteros, 10 mil 352 drones, 445 sistemas de misiles antiaéreos y 14 mil 434 tanques.
Además, Rusia quedó como la quinta economía del mundo por su poder adquisitivo y otros parámetros, tras reorientar el grueso de sus exportaciones y reducir la cuota de ingresos directamente relacionados con la venta de hidrocarburos en favor de otros rubros.
La operación bélica, anunciada por el presidente Vladimir Putin el 24 febrero de 2022 para proteger a la población de la región sublevada del Donbás, así como para desmilitarizar y desnazificar a Ucrania, catalizó un aumento colosal de la producción de armamentos de Rusia.
En opinión de Clark, el rechazo por algunos congresistas del partido republicano en Estados Unidos a mantener la ayuda militar a Kiev y las posibilidades del triunfo de esa formación en las elecciones de noviembre próximo hacen probable una suspensión total de ese respaldo.
Washington envió armamentos a Ucrania por más de 44 mil millones de dólares, incluida una reciente partida de 250 millones, destacó la televisión local.
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