En un escueto comunicado, la Cancillería hizo referencia a las numerosas víctimas provocadas por la doble explosión, sin realizar más comentarios al respecto.
Ayer se produjo en Kerman un atentado cerca de la tumba del general Qasem Soleimani, de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, asesinado en Bagdad hace cuatro años en un ataque estadounidense con drones.
Un informe de la Organización de la Medicina Forense de Irán rectificó el dato de las víctimas mortales y situó la cifra en 84 personas, mientras confirmaron que al menos 284 resultaron heridos en el incidente, algunos en estado grave.
Anoche, el ayatola Ali Jamenei expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas fatales en Kerman y prometió una dura respuesta de Irán, la cual calificó de “un castigo justo que iniciará de inmediato”.
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