La oficina de prensa del gobierno del enclave costero señaló en un comunicado que la situación es particularmente crítica en el norte de la zona.
Necesitamos el ingreso de unos mil 300 camiones de comida diarios para vencer al hambre, afirmó el texto.
Sin embargo, rara vez el número total de camiones sobrepasa los 200 cada 24 horas, según datos oficiales.
La declaración criticó a Israel por impedir y entorpecer la entrada a la Franja de los suministros de primera necesidad para 2,3 millones personas, incluidos alimentos, agua y medicinas.
Ante esa situación, responsabilizó a “la comunidad internacional, Estados Unidos y la ocupación (Israel) de los resultados catastróficos y las muertes debidas a la hambruna y la sed”.
El gobierno de Benjamin Netanyahu cerró todos los cruces fronterizos que unen a su país con el enclave costero, y bombardeó varias veces el paso de Rafah, que conecta a Gaza con Egipto.
Este último se convirtió en la única ventana para entrar ayuda vital al territorio, pese a los controles israelíes y los intentos por limitar su volumen, aunque no fue creado con ese fin, sino para el paso peatonal.
mem/rob