Una nota divulgada este jueves en el sitio digital del diario L’Osservatore Romano, señala que este proyecto humanitario, promovido por el gobierno italiano, se ejecutará en coordinación con las autoridades de Egipto, pues los infantes cruzarán previamente la frontera hacia ese país, para luego viajar vía aérea hacia Roma.
La fecha de la primera salida aún está por precisarse debido a que primero se debe llegar a un consenso sobre el número de acompañantes que viajarán con los niños, pero ya se trabajan para definir las instalaciones hospitalarias a las cuales serán enviados, señaló en declaraciones a ese medio el fraile franciscano Ibrahim Faltas.
La recepción inicial y la clasificación en los centros sanitarios estarán a cargo del Hospital Bambino Gesú, de Roma, mientras que entre los centros sanitarios implicados se encuentran además el Gaslini, de Génova, así como el Meyer, de Florencia y el Rizzoli, de Bolonia, precisó Faltas, quien participa en los preparativos.
El sacerdote de origen egipcio y actual Vicario de la Custodia de Tierra Santa, resaltó que con el propósito de viabilizar esta iniciativa, propuesta desde hace dos semanas, “el esfuerzo demostrado por las instituciones italianas de Defensa y Salud fue verdaderamente encomiable”.
El presidente del nosocomio Bambino Gesú, Tiziano Onesti, manifestó por su parte que “en un contexto internacional tan dramático, ante situaciones de gran sufrimiento que afectan a los niños, especialmente si están heridos o padecen enfermedades graves, es fundamental poder ofrecer una respuesta terapéutica” como “signo de paz y esperanza”.
Al principio se pensó en trasladar a Italia “dos grupos de 50 niños cada uno, pero luego se decidió por tres grupos de 40, es decir, un total de 120 niños”, precisó Faltas.
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