Tras las acusaciones por presuntos vínculos de una docena de sus miembros con el grupo de la resistencia Hamas, la Unrwa continúa sus esfuerzos para apoyar a los civiles, aseguró la agencia en un mensaje publicado en la red social X.
Este lunes, Naciones Unidas confirmó el inicio de una investigación de la Oficina de Servicios de Supervisión Interna al respecto, en medio de varios llamados de alerta de representantes del organismo para no cerrar el apoyo a la mayor organización de ayuda en el enclave.
El secretario general de la ONU, António Guterres, instó los países que suspendieron la financiación a reconsiderar sus decisiones para, al menos, garantizar la continuidad de sus vitales operaciones humanitarias.
Las Naciones Unidas están tomando medidas rápidas tras los señalamientos graves contra varios miembros del personal de la Agencia, señaló el alto representante en un comunicado divulgado el domingo.
Por su parte, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió que la falta de financiamiento sólo perjudicará al pueblo de la Franja tras casi cuatro meses de intensos combates.
El pueblo del enclave ha soportado horrores y privaciones inimaginables durante meses, aseveró también el coordinador de ayuda humanitaria de la ONU, Martin Griffiths.
«Sus necesidades nunca han sido mayores, y nuestra capacidad humanitaria para ayudarlos nunca ha estado tan bajo amenaza. Necesitamos esforzarnos al máximo para darle al pueblo de Gaza un momento de esperanza”, agregó.
La Unrwa suele tener 13 mil empleados que prestan servicios a las comunidades palestinas en Gaza, sin embargo, tras la ofensiva israelí apenas tres mil personas trabajan en la zona de guerra.
Como parte de su labor, la Agencia gestiona refugios para más de un millón de personas y proporciona alimentos y atención sanitaria a civiles que lo necesitan con urgencia desde el inicio del conflicto.
Fundada en 1948, la entidad para refugiados palestinos fue creada para atender las necesidades de los desplazados de la guerra durante la fundación de Israel, al tiempo que brindaba educación, salud y otros servicios a los palestinos en Gaza, Cisjordania, Jordania, Siria y el Líbano.
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