Este martes en la tarde, el legislativo se opuso al alza de ese tributo, calificado de regresivo porque afecta por igual a ricos y a personas de clases medias y bajas.
Sin embargo, en cuestión de horas, el jefe del Ejecutivo presentó un veto parcial al proyecto de ley, con el cual el Gobierno afirma que busca incrementar los ingresos para enfrentar el conflicto armado interno.
En el documento enviado a la Asamblea, Noboa insiste en su propuesta de subir el IVA del 12 al 13 por ciento de forma permanente y pide que el presidente de la República pueda modificar la tarifa hasta un 15 por ciento, previo dictamen favorable del ente rector de las finanzas públicas.
La Asamblea requiere por lo menos 92 votos de entre sus 137 legisladores para mantener el proyecto aprobado este jueves, una cantidad que no reúne ninguna fuerza política.
Lamentamos que no se haya archivado el proyecto como propusimos en la sesión y siquiera se sometió a votación, manifestó el asambleísta de la Revolución Ciudadana Blasco Luna.
Agregó que aunque rechazaron el aumento del IVA quedó abierta la puerta para mediante el veto presidencial insistir en subir ese gravamen y perjudicar la economía de los ecuatorianos.
Este martes cientos de ecuatorianos se congregaron en las afueras de la Asamblea para pronunciarse a favor y en contra del alza del IVA, la más polémica de las sugerencias de Noboa.
Representantes de organizaciones sociales y sindicales exigieron al mandatario y a la empresa de su familia pagar los impuestos que adeudan al Estado en vez de atentar contra los bolsillos de las mayorías.
La disposición aprobada este martes rechazó el IVA, pero sí dio paso a un gravamen a las utilidades de bancos y cooperativas de ahorro y crédito, incremento de hasta el cinco por ciento al impuesto a la salida de divisas, contribución temporal de seguridad sobre las ganancias de empresas, y del cinco por ciento del IVA para materiales de construcción.
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