La organización no gubernamental alertó en un comunicado que el sistema de salud en el enclave costero, donde viven 2,3 millones de palestinos, está al borde del colapso.
El único centro médico de Gaza especializado en el tratamiento de pacientes con cáncer, el Hospital de la Amistad Turco-Palestina, dejó de funcionar a principios de noviembre último tras quedarse sin combustible y sufrir graves daños debido a los ataques aéreos, subrayó.
La institución expresó que tal situación tiene efectos significativos en pacientes oncológicos.
Pese a la urgente necesidad de suministros médicos, la cantidad de ayuda humanitaria que actualmente ingresa a Gaza es vergonzosamente baja, y las restricciones impuestas por las autoridades israelíes a algunos suministros impiden la entrada de medicamentos y equipos vitales, como dispositivos de diagnóstico, destacó.
Antes de la agresión, miles de pacientes solicitaban un permiso para salir de Gaza cada año porque necesitaban atención médica especializada.
Según datos de la Organización Mundial de Salud, en 2021 más de 15 mil 400 personas de ese territorio presentaron solicitudes de tratamiento en el extranjero, pero Israel solo autorizó dos mil 165, 14 por ciento del total.
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