Sánchez, jefe del Gobierno español, firmó junto a Arévalo la Declaración Conjunta en la que ambos países muestran su compromiso con la democracia y los derechos humanos, y en la que se recogen las principales prioridades de la relación bilateral.
El anfitrión trasladó al dignatario de la nación centroamericana el compromiso de España con la democracia, el Estado de Derecho y los derechos humanos en Guatemala y le agradeció su liderazgo.
Recordó igualmente el compromiso histórico de la cooperación para el desarrollo española en Guatemala, que se inició en 1990, y la disposición de España para negociar un nuevo programa (2025-2028).
Arévalo realiza su primer viaje oficial, coincidiendo con el 160 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Sánchez aprovechó la ocasión para ofrecer un renovado espaldarazo al gobernante guatemalteco, a la vez que reiteró su firme rechazo a las constantes e injustificadas interferencias judiciales, de las cuales fue víctima Arévalo.
Al mismo tiempo, se comprometió a profundizar los lazos y mantener a España como el principal inversor europeo en Guatemala y con mayor presencia a nivel empresarial.
Arévalo será recibido por el rey Felipe VI y ofrecerá este viernes una rueda de prensa en la Casa de América de Madrid.
Por otra parte, Sánchez recibirá la próxima semana al presidente de Paraguay, Santiago Peña, y a comienzos de marzo viajará a Brasil y Chile, donde se reunirá con los presidentes del gigante sudamericano, Luiz Inácio Lula da Silva, en Brasilia, y del país austral, Gabriel Boric, en Santiago.
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