La decisión de gabinete de Benjamin Netanyahu es un desafío escandaloso a la comunidad internacional y socava las posibilidades de establecer un Estado palestino independiente, denunció el primer ministro Muhammad Shtayyeh.
Recordó que tal anuncio coincidió “con los argumentos en curso en la Corte Internacional de Justicia sobre la naturaleza de la ocupación de los territorios palestinos”.
La acción demuestra el desprecio de Israel por las leyes internacionales, afirmó el dirigente palestino.
Shtayyeh llamó al mundo a detener los crímenes y violaciones cometidos por ese país en la Franja de Gaza, que incluyen los asesinatos de menores, mujeres y ancianos.
En similar sentido se pronunció mediante un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados.
La Cancillería consideró el plan “un intento oficial israelí de anexar Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental, y socavar cualquier oportunidad de materializar el Estado palestino sobre el terreno”.
Subrayó que ese proyecto es un desafío flagrante a las resoluciones sobre el tema del Consejo de Seguridad de la ONU y a los esfuerzos realizados para detener la guerra en curso y resolver el conflicto por medios políticos.
El ministro israelí de Finanzas, el ultraderechista, Bezelel Smotrich, anunció el jueves que el Gobierno dio luz verde a la construcción de más de tres mil 300 viviendas en colonias judías en torno a la zona ocupada de Jerusalén Este.
Detalló que dos mil 350 se levantarán en el asentamiento de Ma’ale Adumim, 300 en Kedar y 694 en Efrat.
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