En el Fenway Park de Boston, los locales se destaparon a batear desde el inicio del encuentro y en el mismo segundo inning hicieron seis carreras con un grand slam, incluido el primera base Kyle Schwarber a 430 pies de distancia, el tercero del equipo en los últimos dos juegos.
Pero por si fuera poco, una entrada después volvieron a la carga para ampliar la ventaja, que ya era grande, y fabricaron tres anotaciones, dos de ellas por cuadrangular de Christian Arroyo por el jardín izquierdo con Hunter Renfroe en base.
Así las cosas, en el sexto episodio marcaron dos veces más cuando J.D. Martínez la sacó por el jardín izquierdo y también anotó Rafael Devers, luego remataron en el octavo con el cuarto jonrón de la noche, salido de las muñecas de este último.
Por su parte, los Astros solo pudieron anotar en el cuarto gracias a un vuela cercas de Kyle Tucker con Michael Brantley y el cubano Yordan Álvarez en circulación.
El lanzador ganador fue el venezolano Eduardo Rodríguez, quien se mantuvo en el montículo por seis inning, permitió tres carreras limpias, ponchó a siete y no dio boletos, mientras José Urquidy cargó con el revés y en 1,2 episodios le anotaron cinco veces y solo pudo ponchar a un rival.
El manager de Houston, Dusty Baker, utilizó a varios relevistas, pero ya el mal estaba hecho, pues solo le quedaba preservar sus fuerzas para tratar de emparejar la serie en el próximo encuentro.
Con este resultado, los Medias Rojas se pusieron delante 2-1 y peligrosamente están aproximándose al título de la Liga Americana, aunque queda camino por recorrer y tienen un rival de valía, el cual no se rinde fácil.
Estos equipos volverán a verse las caras mañana en el cuarto partido del play off semifinal y seguramente los de Houston saldrán con todo a igualar las acciones.
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