La postura del ente quedó oficializada en un pronunciamiento en el cual precisó temas que le preocupan, teniendo en cuenta recientes disposiciones del ejecutivo.
El texto explica que ayer la administración nacional publicó el Decreto 238 con indicaciones para dar paso al incentivo de la inversión privada en las distintas áreas de servicio público de la energía eléctrica y reformular el modelo de desarrollo del sector para viabilizar la participación de capital mixto y privado en todas las etapas.
La normativa habla además de convocar a los procesos públicos de selección para la concesión del Bloque de Ciclo Combinado Termo Gas Machala, Sistema de Transmisión Noro1iental, Bloque de Ciclo Combinado Gas Natural y la gestión delegada de la Central Sopladora.
‘Con esas disposiciones se establece que las empresas del sector privado podrán realizar las actividades que le corresponden al sector público, es decir el paso inicial para que la privatización de este sector vaya en escala’, sentenció el directorio del Comité de Trabajadores.
Seguidamente, el ente expresó preocupación por el nuevo reglamento, que según dijo se adoptó de manera unilateral, sin análisis previo sobre las condiciones de las empresas eléctricas a nivel nacional.
‘Como parte del sector conocemos muy bien que la rentabilidad que le brindan al estado las empresas públicas cubren los gastos de operación y además generan ganancias, por tanto, aquella desatinada decisión nos causa indignación’, enfatizó.
De acuerdo con el decreto, se deberá establecer la metodología de cálculo para los costos variables de producción de las centrales hidroeléctricas.
Asimismo, señala que las compañías de distribución remitirán la información de sus costos de operación y ejecutarán un estudio para la expedición del pliego tarifado del año 2022, lo cual resulta preocupante, pues lo interpretan, a simple vista, como la próxima elevación de los precios de consumo, cuando los capitales privados ingresen a la gestión pública.
Con esos precedentes, el directorio del Comité de Trabajadores de la Empresa Eléctrica de Quito ratificó la decisión de mantenerse en movilización permanente.
La determinación se produjo el segundo día de protestas registradas en numerosas ciudades del país contra el alza en los precios de los combustibles, los recortes presupuestarios en salud y educación y por la aprobación en la Asamblea Nacional de la propuesta de Código Laboral, presentada por el Frente Unitario de Trabajadores.
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