Las autoridades neozelandesas aconsejaron a las personas en las zonas costeras que se trasladaran inmediatamente a terrenos elevados.
Según el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC, siglas en inglés), fuertes olas de tsunami son posibles en un radio de 300 kilómetros del epicentro del terremoto.
El monitor sísmico del gobierno de Nueva Zelanda, Geonet, calculó el sismo en una magnitud de 7,2, con una profundidad de 94 kilómetros.
La escala de Richter va desde hasta uno hasta 10, por lo que cualquier movimiento telúrico superior a siete se considera de gran magnitud.
Más de 60 mil personas informaron haber sentido el terremoto en el sitio web de GeoNet, 282 lo describieron como ‘severo’ y 75 dijeron que el temblor fue ‘extremo’, mientras que los demás lo describieron como ligero.
La ciudad más cercana al epicentro es Gisborne, con una población de aproximadamente 35 mil 500 residentes, pero a todos los residentes en la costa desde Cape Runaway hasta Tolaga Bay se les aconsejó que se evacuaran.
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