El texto presenta cambios en los cuestionamientos de constitucionalidad proferidos por De Sousa en enero pasado (cuando fue aprobado entonces), y que el Tribunal Constitucional, con votación dividida (siete a cinco), terminó por darle la razón.
Durante la sesión 138 diputados otorgaron luz verde al proyecto, al que la semana próxima el jefe de Estado deberá promulgar, vetar o remitir nuevamente al máximo tribunal. Hubo cinco abstenciones y 84 votos en contra.
La legislación, que esperó 26 años desde las primeras discusiones sobre el tema en el país lusitano, fue eliminada en marzo pasado por el Tribunal Constitucional al considerar muy subjetivos conceptos como “lesión definitiva de gravedad extrema” y “situación de sufrimiento insoportable”, ahora salvados en el texto.
No obstante, la máxima instancia judicial no cerró el camino a una futura ley al considerar que la despenalización de la eutanasia no constituía un obstáculo a la inviolabilidad de la vida.
A favor del documento estuvo la mayoría de los legisladores del gobernante Partido Socialista, del Bloque de Izquierda, Los Verdes, de Personas-Animales-Naturaleza y de Iniciativa Liberal.
También la apoyaron 13 diputados socialdemócratas, incluido su líder Rui Río, y las dos independientes.
En contra se mostraron las bancadas de los comunistas, el CDS-Partido Popular, el único de Chega (Basta), siete socialistas y 62 socialdemócratas.
Las abstenciones fueron dos del partido gubernamental y tres del Socialdemócrata, incluido Adao Silva (quien apoyó el texto en enero pasado), pero consideró que no debió ponerse en agenda a días de finalizar la legislatura por la convocatoria a elecciones anticipadas, fijadas para el 30 de enero del año próximo.
La actual Asamblea sesionará hasta el próximo día 26. Durante esta jornada también se aprobaron otras leyes como la de modificación al teletrabajo, la prohibición de la discriminación por motivos de orientación sexual en las donaciones de sangre y otra sobre el clima.
Tras la desaprobación del plan de presupuesto del Estado para 2022, el mandatario dijo que decidiría sobre la convocatoria a comicios adelantados, un hecho que ocurrió la víspera mediante una alocución al país.
Al referirse a las circunstancias en que ocurrió la votación contraria, De Sousa afirmó que sucedió en un momento decisivo en el que la humanidad busca una salida definitiva a la mayor pandemia (Covid-19) de los últimos 100 años y de la crisis económica y social que provocó.
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