Calles aledañas a la sede del Hemiciclo amanecieron cerradas y con fuerte dispositivo de seguridad por la presencia del presidente Alejandro Giammattei, quien rendirá su informe de segundo año de gobierno.
Al tomar posesión del cargo, Rivera consideró este momento un honor y privilegio, además de «una enorme responsabilidad y compromiso con Dios, mi patria y mi familia».
Exhortó a todos los lideres nacionales a consolidar la democracia para que prevalezca el respeto a los consensos y valores democráticos que permiten la convivencia.
Me comprometo a promover una legislación que proteja a las personas y reconozca a la familia como el génesis primario de la sociedad, anunció, al tiempo que llamó a la unidad para alcanzar desarrollo y buscar juntos las mejores soluciones sociales.
Tengan la certeza, aseguró, que me acercaré a la población, escucharé las demandas sociales y atenderé sus peticiones y necesidades, acotó.
En lo personal, dijo, impulsaré leyes para la salud, educación, desarrollo de las mujeres, de la niñez y adolescencia, apoyo al adulto mayor y reactivación económica.
Rivera es la tercera mujer en ocupar el puesto más alto del Organismo Legislativo y analistas consideran que su mandato tendrá como trasfondo los intereses de un año preelectoral y bancadas divididas desde ya.
Los bloques Vamos, Unión del Cambio Nacional, FCN Nación, Todos, Prosperidad Ciudadana, Podemos y los únicos dos independientes fueron disciplinados en su apoyo, pero juntos suman 50 diputados, una cantidad insuficiente para aprobar leyes o ratificar medidas de excepción.
Otros 10 bloques con muestras de divisiones internas para apoyar o rechazar al oficialismo suman 103 diputados, una cantidad crucial para cualquier decisión.
De momento, esas siete bancadas disciplinadas y fieles al oficialismo se van a ir alejando paulatinamente por intereses electorales, dejando una tarea difícil a la nueva presidenta y su junta directiva en la consolidación de acuerdos que se transformen en nuevas leyes y medidas de Estado.
Sobre todo, con la herencia de desgaste político que deja su antecesor y compañero de partido, Allan Rodríguez en sus dos años al mando legislativo.
Le acompañarán en la Junta Directiva 2022-2023, el primer vicepresidente Carlos López (Unidad Nacional de la Esperanza, UNE), Carolina Orellana como segunda vicepresidenta (Unión del Cambio Nacional), y Efraín Menéndez, tercer vicepresidente y del partido Valor.
Completan la alianza Mynor Mejía, primer secretario y también de Vamos, Julio Longo, segundo secretario y de FCN Nación; Carlos Nájera, tercer secretario (UNE), Aníbal Rojas, cuarto secretario (Viva) y Marvin Alvarado, quinto secretario (Bien).
mem/mmc