Para el también candidato presidencial, en declaraciones citadas por la radio Mustaqbal, es posible que la nación del cuerno africano vuelva a tener un gobierno de transición.
Tras dar su apoyo al primer ministro Mohamed Hussein Roble, Mohamud cargó contra el jefe de Estado Mohamed «Farmajo» Abdullahi (cuyo mandato concluyó en abril del año pasado).
Para el presidenciable, Farmajo (como le conocen aquí) tiene una escasa capacidad de liderazgo y nulo historial de desarrollo, al afirmar que el país no ha progresado mucho desde su mandato.
Los políticos, dijo, deben superar sus diferencias y apoyar la administración electoral dirigida por Roble.
Hago un llamamiento a la resolución de todas las disputas y al apoyo sincero de las autoridades implicadas en la celebración de los comicios, subrayó.
Somalia vive una crisis institucional desde 1991 con el derrocamiento del ya fallecido presidente Mohamed Siad Barre, agravada por los enfrentamientos entre los dos hombres fuertes: Roble y Farmajo.
Tras un acuerdo con actores políticos, el Consejo Consultivo Nacional anunció hace casi una semana que los comicios parlamentarios se completarían el 25 de febrero. Aquí no se celebran elecciones presidenciales en por lo menos 50 años.
En diciembre de 2020 debieron completarse los miembros al parlamento, que a su vez escogerían al jefe de Estado (enero del año pasado).
Igualmente, se conoció este martes que la Comisión Federal de Resolución de Disputas Electorales nombró una comisión organizadora de cinco miembros para escoger a su nuevo presidente.
En una carta firmada por el vicepresidente de la Comisión Federal de Resolución de Disputas Electorales Indirectas, Mohamed Ibrahim Barre, los miembros de la comisión recibieron instrucciones para llevar a cabo sus mandatos en los próximos días para ajustarse al calendario de la justa.
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