El aumento de la violencia es evidente en casi todo el país, pero Guayaquil es la ciudad con más problemas, sobre todo relacionados con el narcotráfico.
Entre los hechos más recientes constan cinco asesinatos ocurridos en un término de seis horas en diferentes zonas de la urbe.
La situación violenta continúa pese a que desde esta semana se reforzó la presencia de agentes del orden en las zonas más conflictivas.
Asimismo, desde el pasado domingo 23 de enero, miembros de las Fuerzas Armadas colaboran con las labores para restablecer la seguridad en la ciudad.
Los militares también refuerzan el control fronterizo para evitar el ingreso de drogas desde el norte o de armas desde el sur.
Por otra parte, el presidente de la república, Guillermo Lasso, anunció que se destinarán nueve millones de dólares para equipar a la Policía en Guayaquil.
Mientras, Quito es otra de las ciudades con incremento de actos violentos.
Para muchos, la elevada cifra de homicidios es señal de deficiencias del ejecutivo nacional en varios temas vinculados al control de la tranquilidad ciudadana y la forma de operar la justicia en el país.
A la sazón, la ministra de Gobierno (Interior), Alexandra Vela, entregó a la Asamblea Nacional un proyecto de Ley Orgánica de Seguridad Integral y Fortalecimiento de la Fuerza Pública, que busca, entre otras acciones blindar a los efectivos policiales con los instrumentos necesarios para ejercer bien sus labores.
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