«Un día como hoy los más de 100 años de lucha de la nación iraní finalmente tuvieron su fruto y se cumplió el ansioso deseo del pueblo iraní de lograr la independencia, la libertad y el sistema republicano», señaló el diplomático en un comunicado al que accedió Prensa Latina.
El texto recuerda que a diferencia de otras, la Revolución Islámica no triunfó a través del conflicto armado, la violencia y la confrontación militar, sino por medios pacíficos y marchas populares.
Asimismo, enfatiza en que la victoria se logró bajo el liderazgo del Ayatollah Khomeini, con el cual se puso fin al régimen monárquico imperante y a un gobierno dictatorial, autoritario y completamente dependiente a poderes extranjeros, para abrir un nuevo capítulo en la historia de esa nación.
Pabarja recalcó que la República Islámica de Irán presenta un nuevo modelo político al mundo, derivado de los valores religiosos y basado en los principios de la democracia y el voto popular.
Por otra parte, señaló que el gobierno de Estados Unidos, desde los primeros días de la victoria de la Revolución Islámica, vio amenazados sus intereses en la sensible región de Asia Occidental y trató de crear problemas, sabotajes y crisis para la nación persa.
En ese sentido, mencionó que el país norteño apoyó intentos separatistas, apoyó golpes de estado y aplicó severas sanciones económicas, entre otras medidas unilaterales.
«Afortunadamente, con la resistencia y la estabilidad del gobierno y el pueblo, estas medidas no han podido detener a la República Islámica de Irán en su camino de crecimiento», aseguró.
Agregó que luego de 43 años, el proceso sigue con mayor firmeza, motivación y con gran respaldo popular, en camino hacia la justicia, igualdad y progreso, siempre con el espíritu de libertad y anti-tiranía, además de superar las dificultades, limitaciones y sanciones mediante la resistencia, sabiduría, el discernimiento de las conveniencias y la dignidad de la nación.
Entre los aspectos trascendentes, el diplomático citó cambios en el ámbito de las relaciones exteriores, que han conducido a la formación de una política soberana, dinámica, innovadora, construida en base a la no injerencia en asuntos de otros países y tampoco permitir intromisión en asuntos internos nacionales.
Sobre las relaciones con Estados Unidos, advirtió que hay tres cuestiones a cumplir: el levantamiento de las sanciones impuestas a Irán luego de la retirada del expresidente estadounidense Donald Trump del acuerdo nuclear, garantías de la permanencia de esa nación en el convenio y la creación de un mecanismo para verificar el cumplimiento de las obligaciones.
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