En días recientes, el periodista Horacio Verbitsky difundió en su portal El Cohete a la Luna un artículo titulado Un general paleo (lítico), que da cuenta cómo entre abril y julio de 2019, bajo el mando del general Juan Martín Paleo, actual jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, se desarrolló el ejercicio militar Puma.
Su objetivo era entrenar a militares argentinos para participar con un batallón de despliegue rápido -creado bajo el gobierno de Macri desde 2018 bajo supervisión y financiamiento del Comando Sur de Estados Unidos-, para una invasión a Venezuela, integrando una fuerza multinacional de ocupación.
La noticia generó el repudio del gobierno venezolano; en tanto el presidente de esa nación, Nicolás Maduro, instó la víspera a las autoridades argentinas a investigar el plan gestado durante el mandato de Macri (2015-2019).
En un comunicado, la REDH -que integran destacados intelectuales de este país- señaló que no será cómplice de nuevos genocidios.
«Somos parte de una construcción diversa, fraternal y respetuosa de nuestra Patria Grande para poner fin a la dependencia eterna que las elites locales, como las que representa Macri y su partido, promueven para favorecer sus grandes negocios. Nosotros los pueblos sabemos lo que nos conviene: la paz y la justicia social de Nuestra América unida», remarcó esa organización.
Asimismo, la Red pidió al gobierno argentino expresarse enérgica y públicamente sobre el tema y al Ministro de Defensa, Jorge Taiana, «tomar cartas en el asunto, con medidas contundentes, a los efectos de enviar un mensaje muy claro a las Fuerzas Armadas que este tipo de complicidades con los planes belicistas y fratricidas del imperio no sólo no será tolerada sino que será objeto de ejemplares castigos».
En su misiva, difundida en internet, ese colectivo recordó que se ha hecho mucho esfuerzo mediante las luchas y los juicios por memoria, verdad y justicia y para renovar unas Fuerzas Armadas respetuosas y ajustadas a la democracia, que supimos conseguir y debemos mejorar.
«No toleraremos volver a verlas manchadas con la sangre de nuestros pueblos hermanos, ni que se conviertan en apéndices o instrumentos de los planes de recolonización de la potencia que se pretende dueña del hemisferio, y del mundo», acotó.
Asimismo, la Red refirió que el “delito” de Venezuela es haberse apartado de los objetivos de Washington de recuperar un país que por 100 años fue una colonia petrolera al servicio de las empresas norteamericanas.
Lamentamos una vez más la ignominiosa muestra de sometimiento del macrismo y sus partidos con las directivas emanadas de la Casa Blanca, encaminadas a destruir un país y provocar inmensos sufrimientos a su población, mientras construye su historia de manera soberana con indecibles sacrificios por las hostilidades permanentes del que es objeto, concluye el comunicado.
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