La titular de la cartera, Azucena Arbeleche, se ufanó de cumplir esa meta trazada por la coalición de derecha en el poder, al tiempo que calculó un aumento del 4.5 del Producto Interno Bruto (PBI) en 2021.
Bergara, economista de profesión, cuestionó que la ayuda oficial social ofrecida por el impacto de la pandemia de Covid-19 no llega a 300 millones de dólares, y las ollas populares (alimentación para vulnerables) para paliar el hambre quizás no hubieran sido necesarias.
Sentenció que se trata “del fundamentalismo a espaldas de quienes más necesitan, siguen ajustando más de lo prometido y sin agenda de desarrollo económico y social”.
También la Confederación de Funcionarios del Estado (COFE) salió al cruce de las declaraciones de la ministra y aseguró que por el contrario, el gobierno “ha rebajado los salarios de los trabajadores públicos durante dos años en forma consecutiva”.
La gremial rechazó el criterio gubernamental de que la rebaja salarial significa recuperar el salario perdido, porque “primero que todo debe ser igual a la inflación y lo que exceda ese porcentaje será recuperación, cosa que desde que asumió el actual gobierno nunca sucedió», expuso el dirigente de COFE, Joselo López.
Según estas fuentes, en dos años, el gobierno rebajó los sueldos en más de un seis por ciento, lo que significa un recorte de más de 400 millones de dólares, que repercute directamente en los ingresos de sustentación familiar.
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