En una declaración pública, señaló que la operación militar iniciada por Moscú el pasado 24 de febrero tiene como objetivo proteger a Rusia de las amenazas cada vez más graves de Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Recordó que las acciones militares de la nación euroasiática en Ucrania respondieron a una solicitud de ayuda de los líderes de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y de Lugansk (RPL) y pretenden a “obligar a los provocadores nazis a la paz”.
Según el político ruso, la militarización de Europa del este tras la disolución del Pacto de Varsovia es evidente y las intenciones agresivas de Washington fueron claras durante el proceso de destrucción de Yugoslavia.
“Los objetivos de las autoridades estadounidenses y sus satélites de la OTAN de esclavizar a Ucrania no deben concretarse. Esos planes agresivos plantean amenazas críticas para la seguridad de Rusia. Al mismo tiempo, contradicen los intereses fundamentales del pueblo ucraniano”, apuntó.
El dirigente comunista advirtió que en su camino por aumentar sus capacidades competitivas, a la Casa Blanca no le importan las grandes pérdidas económicas que pueden provocar para los países de la eurozona las medidas punitivas contra Rusia, el torpedeo del gasoducto Nord Stream 2 y la amenaza de guerra regional.
Subrayó la importancia de que los pueblos del mundo se den cuenta del “aventurerismo de la política de Washington” y recuerden la experiencia del amplio movimiento contra la guerra, que en caso de poder activarlo garantizaría la solidaridad con los pueblos amantes de la paz de Rusia y Ucrania y protegería sus derechos al desarrollo. Denunció que la política en territorio ucraniano es dictada en gran medida por “nacionalistas rabiosos” que aterrorizan a la población e imponen un curso político agresivo a las autoridades.
“Cediendo bajo esta presión, Zelensky (Vladimir, jefe de Estado ucraniano) traicionó los intereses de sus conciudadanos, quienes lo eligieron presidente para la paz en el Donbass y la buena vecindad con Rusia”, indicó.
Ziuganov llamó la atención sobre la necesidad apremiante de forzar a Kiev a la paz y frenar la agresividad de la OTAN. “Solo la desmilitarización y desnazificación de Ucrania garantizará la seguridad sostenible de los pueblos de Rusia, Ucrania y toda Europa”, enfatizó.
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