La crisis económica derivada de la epidemia de la Covid-19 también incrementó de forma notable el déficit público hasta 9,2 por ciento, su nivel más alto desde 1949, aunque según fuentes gubernamentales las cifras son menores de lo esperado y cuentan con reducirlo en cerca de un punto para final del presente ejercicio.
‘Histórico, porque el déficit para 2020 es el mayor que ha visto Francia en la época contemporánea, y alentador porque es menor de lo que habíamos imaginado’, declaró el viceministro de Cuentas Públicas, Olivier Dussopt.
En números reales la deuda de Francia llegó a 2,65 billones de euros y el déficit a 211 mil 500 millones de euros, cifras que serán actualizadas a finales del mes de abril y que el Gobierno confía en reducirlas al término de 2021.
Con respecto al importante ascenso de la deuda el ministro de Economía, Bruno Le Maire, consideró que ‘los 18 puntos adicionales de 2020 son la traducción del descenso de la actividad de la economía francesa y del considerable esfuerzo para proteger a nuestros empleados y a nuestras empresas’.
La epidemia de la Covid-19 provocó una contracción del 8,2 por ciento del PIB el pasado año, al tiempo que los gastos de las administraciones públicas (estatales, municipales y Seguridad Social) aumentaron 73 mil 600 millones de euros (5,5%), mientras que los ingresos se redujeron en 63 mil 100 millones de euros (-5%), debido a la merma de impuestos y cotizaciones sociales.
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