Los jefes de Estado prestaron especial atención a las cuestiones humanitarias y a las medidas que se toman para garantizar la seguridad de la población civil ucraniana, informó el Kremlin.
En tal sentido, abordaron la organización de los corredores humanitarios y el cese el fuego para la evacuación de civiles de las zonas de combate.
Putin y Niinisto acordaron seguir en contacto sobre las cuestiones ucranianas y la agenda ruso-finlandesa, indicó un comunicado.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar especial en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk le solicitaran ayuda para repeler el aumento de la agresión de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
Putin, en un discurso para informar sobre el inicio de la operación, afirmó que el objetivo es proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio de Kiev durante los últimos ocho años y “desmilitarizar” Ucrania.
Según el Ministerio de Defensa los ataques no están dirigidos a la población ni a las ciudades ucranianas, sino contra sus objetivos e infraestructuras militares.
mgt/mml
















