En una reunión este jueves con su homólogo interino del Gobierno talibán, Amir Khan Muttaqi, el alto funcionario ruso advirtió sobre la necesidad de que el Ejecutivo sea inclusivo, no sólo a nivel étnico-confesional, sino también en la participación de otras fuerzas políticas.
Lavrov marcó la asistencia humanitaria como otra prioridad que debe asumir la comunidad internacional, en el encuentro sostenido con el representante de Kabul al margen de la tercera conferencia ministerial de los vecinos de Afganistán (Rusia, China, Irán, Pakistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán), en la ciudad china de Tunxi.
Durante la reunión, el ministro ruso de Asuntos Exteriores subrayó que Los países occidentales son responsables de la situación actual de la economía de esa nación centroasiática.
“Tras 20 años de presencia militar de la OTAN, acompañada del experimento totalmente fallido de imponer recetas y valores ajenos al pueblo afgano, Occidente en su conjunto es responsable directo de la actual situación humanitaria y del deplorable estado de la economía afgana” dijo.
Por tal razón, apuntó, esas naciones deben asumir la principal carga financiera para superar la crisis y estabilizar la situación de la nación islámica, reportó la agencia de noticias TASS.
El jefe de la diplomacia de Moscú indicó que la Casa Blanca intenta liberarse de la responsabilidad por el destino de los ciudadanos y refugiados afganos, incluidos los que sirvieron a los estadounidenses y que ahora están “atascados” en supuestos países de tránsito en el camino hacia Estados Unidos.
“Parece que Washington no está en contra de dejar a estas personas en la región de forma permanente”, alertó.
A su vez, calificó de cínica y humillante la orden del presidente estadounidense, Joe Biden, de bloquear siete mil millones de dólares de activos del Banco Central de Afganistán en esa nación norteamericana para indemnizar a los familiares de las víctimas de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
“El pueblo afgano no tuvo nada que ver con esos crímenes”, manifestó Lavrov, quien enfatizó que tal decisión limita de forma drástica la capacidad de los talibanes para normalizar la situación y reduce las posibilidades de las Fuerzas Armadas afganas en la lucha contra el terrorismo.
Según el titular ruso de Exteriores, la sinceridad de las intenciones estadounidenses de ayudar a estabilizar la situación en Afganistán es muy cuestionable.
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