La organización PEN America, defensora de la libertad de expresión, realizó el estudio nacional entre más de mil reporteros y editores con el objetivo de determinar cómo la desinformación está perturbando la práctica del periodismo.
El 90 por ciento de los entrevistados dijo que sus materiales se afectaron por esos contenidos falsos.
Los periodistas evaluaron cómo el hecho de trabajar en medio de una avalancha de contenidos creados o distribuidos con la intención de engañar está alterando su profesión, sus relaciones con sus fuentes y audiencias, y sus vidas, señaló el informe.
Las respuestas arrojaron que la desinformación está cambiando significativamente la práctica del periodismo.
Según el tanteo, los periodistas dijeron estar poco preparados al igual que sus redacciones para contrarrestar eficazmente los torrentes de falsedades que amenazan el papel fundamental de la prensa.
Cuatro de cada cinco de los entrevistados opinaron que este es un problema grave, y la mayoría afirmó que se enfrentan a él con regularidad.
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