En un comunicado enviado a Prensa Latina, el diplomático afirmó que se mantiene vigente la propuesta de su gobierno de llegar a una solución pacífica en el caso de la ocupación sionista en Palestina.
“El régimen racista de Israel ha estado ocupando Palestina durante más de 70 años y ha expulsado a su pueblo de sus tierras ancestrales, desplazándolo a otros países”, asegura el texto.
Según explica, desde su fundación en 1948, la ocupación libró seis guerras en la región como parte de la meta de establecer el Gran Israel (desde el río Nilo en Egipto hasta el río Éufrates en Iraq) y llegó a varias partes de territorios en Egipto, Siria, Jordania y Líbano, además de la larga arremetida contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza.
El diplomático señaló que el régimen sionista no cumple con las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre la retirada de esos territorios, rechaza todas las iniciativas presentadas por esa instancia multilateral para resolver el problema y mantiene sus planes expansionistas.
“Esto ha provocado que la cuestión palestina siga siendo la crisis mundial más antigua y compleja durante más de siete décadas, y, además que el pueblo palestino haya sido privado de sus más básicos e imprescindibles derechos, deteriorando sus condiciones de vida día a día”, recalcó.
Al respecto, amplió que dadas las devastadoras consecuencias de las acciones de Israel y las amenazas a la paz y la seguridad regional e internacional, Irán presentó a la ONU el plan «Referéndum Nacional en la Tierra de Palestina con la Participación de Todos los Palestinos, Incluidos Musulmanes, Cristianos, Judíos y sus Hijos».
La iniciativa, propuesta el año pasado, busca llegar a una solución, establecer la paz y estabilidad en el Medio Oriente y brindar a los palestinos la oportunidad de ejercer su derecho a la autodeterminación.
El plan comprende aplicar el derecho de los refugiados palestinos a regresar a su tierra natal y celebrar la consulta popular con los ciudadanos de todas las religiones que vivían en Palestina antes de la ocupación, para determinar el destino de su país y el tipo de sistema político.
Asimismo, impulsa la formación del sistema político deseado por la mayoría del pueblo palestino y la toma de decisiones sobre el estatus de los residentes no nativos.
El Día Mundial de Al-Quds (Jerusalén, en árabe), fue instaurado en 1979 por el imán Jomeini en solidaridad con la causa Palestina y es conmemorado cada año en al menos 90 países el último viernes del sagrado del Ramadán, noveno mes del calendario lunar, caracterizado por el ayuno musulmán en todo el planeta.
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