El documento reconoció que la justicia constitucional es uno de los pilares del progreso y la estabilidad democrática en Iberoamérica, desempeñando un papel protagonista en la salvaguarda de los derechos humanos de la ciudadanía.
En ese sentido, Andorra, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, México, Panamá, Paraguay, Portugal, Uruguay y el país anfitrión, rechazaron las iniciativas tendentes a debilitar la jurisdicción mencionada, como garantía inherente al Estado democrático y social de derecho.
Asimismo, ratificaron su compromiso con el derecho como instrumento de solución de conflictos y rechazaron “el empleo del conflicto armado y de las acciones violentas contrarias al derecho internacional que afecten a la soberanía y a la integridad territorial de los Estados, con violación de los derechos humanos”.
De igual forma, reiteraron que la Conferencia Iberoamericana está basada en el diálogo, la colaboración y la cooperación para reforzar los modelos constitucionales, consolidar los postulados compartidos y perfeccionar los sistemas para dar respuesta a las exigencias de los ciudadanos en el ámbito constitucional.
Finalmente, los participantes en el encuentro agradecieron a Dominicana “por la excelente organización y desarrollo de la reunión y de la Conferencia” y al secretario permanente de la CIJC saliente, Pedro González-Trevijano, por la labor realizada.
Hubo una felicitación para el magistrado Enrique Arnaldo Alcubilla, elegido como secretario permanente de la CIJC, y un agradecimiento por el ofrecimiento de la Corte Constitucional de Ecuador para organizar la XV Conferencia.
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