La declaración del representante de la diplomacia de Moscú en la capital estadounidense respondió a comentarios de varios medios de comunicación de ese país, según los cuales la Casa Blanca decidió suministrar a Kiev lanzacohetes múltiples.
“Esta información debe ser verificada a fondo. Por el momento, partimos de una declaración del portavoz del Pentágono, John Kirby, de que no se tomó una decisión definitiva al respecto”, subrayó Antónov, quien calificó el paso de “muy provocador”, reportó la agencia de noticias TASS.
Destacó que, en repetidas ocasiones, Moscú comunicó a Washington a través de los canales diplomáticos que “el bombeo sin precedentes de armas a Ucrania aumenta significativamente los riesgos de una escalada del conflicto”.
Aclaró que las autoridades norteamericanas están “muy conscientes” de que con tales acciones alejan las perspectivas de paz del conflicto entre Rusia y Ucrania.
El jefe de la diplomacia rusa en Estados Unidos advirtió que Washington se ve cada vez más inmerso en la crisis en ese país, con consecuencias imprevisibles para la seguridad mundial.
“Pedimos que se ponga fin al insensato y extremadamente arriesgado bombeo de armas al país. Es importante rechazar las amenazas contra nosotros y las declaraciones sobre la victoria militar de Ucrania”, apuntó.
El diario The New York Times reveló en días recientes que la jefatura de su país aprobó el envío a Ucrania de lanzacohetes múltiples como parte del próximo paquete de ayuda a Kiev que anunciará la semana entrante.
Según el periódico, es probable que el arma sea el M31 GMLRS (Guided Multiple Launch Rocket System) con un alcance de 70 a 500 kilómetros, dependiendo de la munición. Explicó que ese tipo de lanzacohetes puede estar equipado con misiles guiados, cuyo disparo se corrige desde satélites.
Antónov denunció que existe el riesgo de que esos medios sean desplegados cerca de las fronteras rusas y los ucranianos tengan la oportunidad de atacar ciudades de este país, situación inaceptable para Moscú, enfatizó.
“Para que el conflicto termine cuanto antes, Washington y Kiev deben reconocer la realidad. Permitiría avanzar hacia un arreglo político y evitaría el deterioro de la estabilidad internacional”, aseguró el jefe de la misión diplomática rusa en Estados Unidos.
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