«Rusia y China realizan todos los programas de cooperación aprobados. La cooperación energética adquirió el carácter estratégico. Se están implementando importantes proyectos en el ámbito de la industria, la agricultura y el transporte», añadió el canciller en una conferencia internacional dedicada a las relaciones chino-rusas.
Asimismo, el jefe de la diplomacia de la nación euroasiática ponderó la intención de ambos países de aumentar el uso de monedas nacionales en sus pagos.
«En un momento en que Estados Unidos y la Unión Europea han convertido sus monedas en un instrumento de chantaje, tenemos la intención de desarrollar una infraestructura financiera independiente y aumentar significativamente el uso del rublo y el yuan en los pagos entre nuestros países», indicó Lavrov.
Al respecto, agregó que una cuarta parte del intercambio comercial entre Rusia y China, ya se realiza con el uso de monedas nacionales.
En ese sentido, el cónsul general ruso en la ciudad fronteriza de Harbin, Vladímir Oschepkov, afirmó en una entrevista con la agencia de noticias Sputnik que «de enero a abril de 2022, en la localidad de Suifenhe, los pagos con contrapartes rusas superaron los 840 millones de yuanes (más de 128 millones de dólares), un 370 por ciento más que en los primeros cuatro meses del año pasado».
Por su parte, a mediados de mayo la Administración General de Aduanas de la nación asiática confirmó que el suministro de gas natural licuado (GNL) de Rusia a China aumentó un 15 por ciento interanual entre enero y abril.
En el comunicado difundido por la agencia de noticias TASS la entidad china precisó que el crecimiento de la importación está reflejado en 1,43 millones de toneladas más que en igual período de 2021.
Según los datos divulgados, en términos de valor, la importación de este portador energético ruso se amplió 2,45 veces, por un monto de mil 320 millones de dólares.
La entidad de aduanas del gigante asiático refirió que en términos de volumen físico de suministros de GNL a su país, la nación euroasiática subió del sexto al cuarto puesto de los suministradores de este rubro.
El crecimiento de las exportaciones de Rusia de combustibles y otros insumos a China responde a la estrategia gubernamental de Moscú de diversificar sus productos energéticos a las naciones asiáticas, ante la avalancha de sanciones económicas impuestas por Occidente, entre las que destacan el embargo de su petróleo.
En ese orden, el presidente Vladimir Putin, aseguró a inicios de año que las relaciones bilaterales con China alcanzaron un nivel sin precedentes y actualmente devienen en «referencia de eficacia, responsabilidad y aspiración al futuro» para el mundo.
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