Un comunicado de prensa de esa entidad precisó que los canadienses sintieron el impacto del incremento del costo de los productos el pasado mes, ya que la inflación al consumidor creció al nivel anual más alto desde enero de 1983 y superior al 6,8 por ciento de abril.
El aumento se debió principalmente a los elevados precios de la gasolina, que marcaron un alza del 12 por ciento en mayo respecto a abril, y un salto del 48 por ciento en relación con mayo del año pasado.
Desde la aprobación de sanciones a Moscú por su operación militar en Ucrania, las cotizaciones de los combustibles subieron, ya que Rusia es uno de los principales productores de petróleo.
En abril, los canadienses gastaron en promedio 10 por ciento más en comestibles que en el mismo mes de 2021.
En general, los precios de las verduras aumentaron al igual que las frutas, las carnes, los cereales, el arroz, el pan y las pastas, precisó el comunicado.
También las viviendas son una de las principales causas que impulsan las tasas de inflación y marcaron un aumento de 7,4 por ciento en mayo.
La constante subida del valor de los productos y las previsiones de algunos analistas de que la inflación superará el ocho por ciento en las próximas semanas, anticipa nuevos incrementos fuertes en los tipos de interés por parte del Banco de Canadá.
Esa mencionada autoridad monetaria tiene como objetivo mantener la inflación en un rango entre el uno y el tres por ciento, con la cifra ideal situada en el dos por ciento.
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