Así expresó la consejera de la misión permanente de Cuba ante Naciones Unidas, Yumirka Fernández, durante el debate del tema Cuestión de las Islas Malvinas, en el Comité Especial de Descolonización.
La diplomática recordó que ya son 39 las resoluciones adoptadas sobre el asunto en ese Comité, además de las 11 aprobadas por la Asamblea General.
El reclamo legítimo de Argentina ha sido respaldado durante años por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y también por numerosas agrupaciones regionales, subrayó la representante cubana.
Asismimo, abogó por una solución negociada, justa y definitiva a la cuestión de las Malvinas en el plazo más breve posible, que tome en cuenta el respeto a la integridad territorial de Argentina.
Según destacó, la solución de tal conflicto liberaría otro territorio del colonialismo en América Latina.
La resolución 2065 (XX), adoptada hace casi seis décadas por la Asamblea General, define la cuestión de las Islas Malvinas como una disputa de soberanía entre Argentina y Reino Unido de Malvinas, Georgia del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes.
Ese documento establece, igualmente, que que tal disputa debe resolverse mediante negociaciones entre ambos Estados, teniendo en cuenta las disposiciones y los objetivos fundamentales de la Carta de Naciones Unidas y las resolcuiones al respecto de la Asamblea General.
De acuerdo con el canciller argentino, Santiago Cafiero, urge que Reino Unido cumpla con las resoluciones de la ONU y vuelva a la mesa de negociaciones para hallar una solución pacífica y definitiva.
Buenos Aires pide a Londres abandonar su política de reticencia y ha denunciado en reiteradas ocasiones la presencia militar británica en las Malvinas, la exploración y explotación ilegal de sus recursos naturales y las violaciones de disposiciones de Naciones Unidas, rememoró.
Este año, recalcó Cafiero, se cumplen cuatro décadas del conflicto del Atlántico Sur y eso hace que todo lo relacionado con las Malvinas tenga una envergadura particular.
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