La Corte Suprema de Texas bloqueó la orden de una instancia judicial inferior que permitió a las clínicas en ese estado seguir practicando abortos, luego de la revocación del histórico fallo de Roe contra Wade.
Una orden de un juez de Houston a principios de esta semana aseguró que algunas clínicas podrían reanudar allí temporalmente la interrupción en embarazos de hasta seis semanas de gestación.
Pero a esto le siguió una petición que el fiscal general de Texas, Ken Paxton, hizo al máximo tribunal del estado para suspender ese decreto.
Luego del fallo de la Corte Suprema de revocar el caso de Roe contra Wade -el cual había asegurado el derecho constitucional al aborto en Estados Unidos- muchas clínicas en Texas suspendieron el procedimiento.
Otros estados también atraviesan ahora un cambiante panorama legal en torno a las leyes que dan acceso al proceder médico que pone término a un embarazo.
En Florida, por ejemplo, una ley que prohíbe los abortos después de las 15 semanas de gestación entró en vigor la víspera, un día después de que un juez lo calificó como una violación de la Constitución estatal.
Históricamente, ese estado ha tenido un acceso más amplio a ese tipo de proceder que sus vecinos en el sur.
En Kentucky, una llamada ley de activación que impone una prohibición casi total del aborto entró en vigor la semana pasada, pero un juez la bloqueó hace apenas unos días.
Los analistas consideran que ese tipo de disputas legales sembrarán más caos en un futuro cercano y seguirán surgiendo fallos judiciales capaces de anular el acceso al aborto en cualquier momento.
Incluso, podrían obstaculizar que las mujeres puedan viajar a otros estados donde sí está permitida la interrupción del embarazo.
Por otra parte, la víspera, la Legislatura del Estado de Nueva York aprobó una enmienda que, si se promulga en su totalidad, consagraría el derecho al aborto y el acceso a métodos anticonceptivos en la constitución de ese territorio.
La aprobación de ese documento es el primer paso para agregar ese tema a la Constitución de Nueva York y ahora, los legisladores deberán votar nuevamente para aprobar la enmienda en la sesión legislativa del próximo año.
Después, los neoyorquinos deberán votar para aprobarla en un referéndum antes de que entre en vigor.
El pasado 24 de junio, la Corte Suprema de Estados Unidos -integrada por una gran mayoría conservadora- tomó una decisión que puso fin a las protecciones constitucionales sobre el derecho al aborto contenidas en la histórica sentencia Roe contra Wade, de 1973.
Tras el fallo se han producido protestas en varias ciudades, como Chicago, Atlanta, Houston, Washington y Nueva York para reclamar la legalidad de la interrupción del embarazo.
Además, muchos activistas y especialistas de salud en Estados Unidos exigen que se respeten derechos relativos a la salud sexual y reproductiva de las mujeres, como el aborto.
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