Grossi destacó a Sánchez en el Palacio de la Moncloa la actitud constructiva de España en su colaboración con el OIEA, especialmente en lo que concierne al avance en los usos pacíficos, seguros y responsables de la tecnología nuclear en áreas como las aplicaciones médicas, agrícolas y medioambientales.
Por su parte, el jefe del Ejecutivo español señaló a Grossi su apoyo al trabajo del organismo y al uso pacífico de esta tecnología, al tiempo que reiteró que España seguirá prestando asistencia técnica, especialmente en Iberoamérica.
La nación ibérica aporta alrededor de ocho millones de euros anuales al OIEA, y en 2021 desembolsó adicionalmente cerca de 2,75 millones de euros para temas como el programa de becas Marie Curie y para asistencia a Ucrania, según cifras oficiales.
Grossi y Sánchez hablaron asimismo de la complicada situación geopolítica en lo relativo a la no proliferación de armas nucleares; las dificultades para retomar el Acuerdo Nuclear con Irán y los avances del programa nuclear norcoreano.
Además, la labora de inspectores del OIEA a la central nuclear ucraniana de Zaporiya, la más grande de Europa, afectada durante las operaciones militares de Rusia.
España, que apuesta por una transición energética basada en renovables, contempla el cese de explotación de sus siete reactores operativos entre 2027-2035.
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