El acusado fue declarado culpable el pasado 11 de abril por obstrucción de un procedimiento oficial, desorden civil, entrada y permanencia en un edificio o recinto restringido portando un arma peligrosa y conducta desordenada, entre otros cargos.
«Thomas Robertson, a pesar de haber jurado su cargo cuando se convirtió en oficial de policía, se unió a la turba violenta en el Capitolio el 6 de enero de 2021, y lo hizo mientras estaba armado», dijo el fiscal federal Matthew M. Graves sobre la sentencia.
El exagente, según los documentos judiciales, deberá cumplir tres años de libertad supervisada tras sus 87 meses de prisión, además de pagar dos mil dólares de indemnización.
Robertson empuñaba un palo con el cual intimidó a miembros de la Policía metropolitana.
Su compañero Jacob Fracker, de Rocky Mount, Virginia, también se declaró culpable en marzo de un cargo federal de conspiración.
Tras ser notificado de su arresto, que se produjo el 13 de enero de 2021, Robertson destruyó sus teléfonos y los de Fracker en un intento por ocultar las pruebas de sus acciones, reportó el diario The Hill.
Ambos están entre los más de 860 detenidos por delitos relacionados con el asalto a la sede del Congreso, hecho que dejó cinco muertos y más de 140 policías heridos.
Más de 260 personas fueron acusadas hasta el momento de agredir u obstaculizar a las fuerzas del orden y la investigación sigue en curso, indicó el Departamento de Justicia.
Centenares de simpatizantes de Donald Trump se abalanzaron violentamente sobre el Capitolio aquel día, alentados por la retórica del fraude electoral que difundió el entonces presidente, con el objetivo de impedir la certificación de la victoria de Joe Biden en noviembre de 2020.
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