Según informó el periódico The Detroit News, Adam Fox, residente de Potterville, y Barry Croft, conductor de camión de Delaware, enfrentan una posible cadena perpetua.
«El veredicto confirma que el complot era muy serio, muy peligroso», y que suponía una amenaza para la gobernadora, dijo el fiscal federal de Grand Rapids, Andrew Birg, a los periodistas.
David Porter, agente especial adjunto a cargo de la oficina del Buró Federal de Investigaciones (FBI) en Grand Rapids, advirtió que las opiniones contrarias al gobierno no justifican la violencia.
Se puede criticar al gobierno, se puede protestar, puedes expulsar a tus funcionarios elegidos, subrayó Porter, pero no se puede planear cometer actos de violencia, porque esa nunca será la respuesta.
El caso de terrorismo doméstico que fue abortado arrojó luz sobre el extremismo político en Michigan, apuntó el rotativo.
Durante el proceso resultaron absueltos Daniel Harris y Brandon Caserta, que formaban parte de un grupo más amplio de personas molestas por las restricciones pandémicas y que esperaban desencadenar una segunda Guerra Civil.
Los veredictos otorgan al Departamento de Justicia de Estados Unidos una victoria histórica en la persecución del extremismo y el terrorismo doméstico en medio de un aumento de las amenazas en todo el país, acotó el periódico.
Fox y Croft, que tildaron de “tirana” a Whitmer por las medidas que tomó para frenar la Covid-19 y que además pretendían hacerle un “juicio”, figuran entre los seis presuntos simpatizantes de derecha detenidos en octubre de 2020 tras una operación encubierta del FBI.
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