El incidente ocurrió, según difundió la agencia nacional SANA, en la localidad de Al-Dabaa en el municipio de al-Qusseior cerca de la frontera con el Líbano.
La referida localidad fue liberada de los terroristas en 2014, y a pesar de su desminado por el ejército sirio aún quedan artefactos explosivos sembrados por los radicales y cobran la vida de inocentes civiles.
El día 23 de agosto pasado, un menor de 11 años de edad perdió la vida, y sus cinco hermanos resultaron heridos, por el estallido de una carga explosiva en la provincia de Deraa en el sur de Siria.
Según recientes datos del departamento antiminas de la ONU en Siria, entre 2015 y 2022, unas 15 mil personas murieron o resultaron heridas por minas, es decir cinco por día.
A su vez, el gobierno reveló en junio pasado que las fuerzas armadas sirias desactivaron más de 50 mil cargas explosivas, 84 mil proyectiles sin explotar y 45 mil minas de varios tipos, y desminaron más de 55 mil hectáreas del país.
mem/fm