Los equipos de investigación epidemiológica detectaron un caso sospechoso de cólera de un niño de nueve años de edad, que padecía síntomas de diarrea aguda acompañada por vómitos frecuentes, y sus análisis dieron positivo a este virus, informó el Ministerio por medio de un comunicado.
Agregó que el menos fue dado de alta médica a los pocos días, luego de recibir el tratamiento necesario, y su estado de salud ahora es estable.
El ente dio a conocer que, coincidiendo con el caso del niño, se registró un aumento en el número de pacientes que padecían de mala digestión en los hospitales de Alepo, y 15 de los casos dieron positivos al virus.
Señaló que las autoridades epidemiológicas tomaron muestras del sistema de alcantarillado y de la red de agua en varias localidades, especialmente en la zona de los infectados, y se confirmó el virus en la aguas residenciales y en los productos de una fábrica de cubitos de hielo que fue cerrada de inmediato.
El Ministerio destacó que los cuadros de salud intensificaron la vigilancia epidemiológica de cualquier caso en los hospitales y centros de salud y se asignaron salas de aislamiento para casos sospechosos.
De igual manera, se reforzó el control de seguridad del agua potable al echarle cloro y dar tratamiento preventivo a los contactos de los enfermos.
Por otro lado, activistas locales confirmaron la muerte de cuatro personas por síntomas parecidas a las de cólera en zonas controladas por las llamadas Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) en la provincia oriental de Deir Ezzor.
La causa, según las fuentes, es la contaminación de las fuentes de agua y la falta de sustancias de desinfección, e indicaron que la mayoría de los casos fueron reportados en la localidad de Kisra.
Siria enfrenta desde 2011, una guerra impuesta que afectó su sistema de salud y provocó un deterioro en los servicio, lo cual degradó los índices de salud de la población.
jcm/fm