Se trata de respaldar una iniciativa de las Naciones Unidas coordinada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en un contexto de crisis múltiples e interrelacionadas que provocan el alza del costo de la vida, en particular los precios de los alimentos y de la energía, y de una espiral de deuda mundial.
Los titulares de Trabajo y Empleo del G20 se reunieron y comprometieron a reforzar las protecciones laborales para aumentar la resiliencia de todos los empleados, a la luz de los nuevos retos creados por la digitalización y la crisis climática.
También se pronunciaron por dotar a los trabajadores con las habilidades que necesitan para aprovechar las oportunidades de las economías digital y verde, al tiempo que acogieron con satisfacción la actualización de la Estrategia de Competencias del G20.
Además reafirmaron su compromiso de acelerar y supervisar los progresos realizados en la inclusión de más personas con discapacidad en el mercado laboral.
Ryder se refirió a la evolución del mercado mundial de trabajo, así como a los avances en la reducción de la brecha de género en la participación de la fuerza laboral, y en la implementación del Acelerador Global de Empleos y Protección Social para Transiciones Justas, una iniciativa lanzada originalmente en septiembre de 2021.
Precisó que se requiere un esfuerzo colectivo renovado para gestionar mejor y, en última instancia, salir de estas crisis, garantizar que los beneficios de la globalización se compartan de forma más equitativa, dentro y entre los países, y abordar las transformaciones económicas estructurales que se avecinan.
Para el titular de la OIT es urgente un esfuerzo político de transformación de género para crear más y mejores empleos para las mujeres, lo cual debe traducirse en esfuerzos a largo plazo para la mejora de la calidad del empleo de las féminas.
Al hablar de la situación actual del mercado del trabajo, Ryder destacó que con la previsión de que la inflación mundial siga elevada, las perspectivas del poder adquisitivo y el nivel de vida de los trabajadores de todo el mundo son muy preocupantes, situación que podría evolucionar hacia una inestabilidad más amplia.
El Acelerador Mundial del Empleo y la Protección Social para Transiciones Justa tiene como objetivo garantizar el apoyo político y la financiación necesarios para crear 400 millones de puestos de trabajo y ampliar la protección social a los cuatro mil millones de personas que actualmente carecen de cobertura.
Dicha iniciativa reúne a todo el sistema multilateral para anticipar y gestionar de forma proactiva las diferentes transiciones pendientes: medioambientales, sociales y económicas.
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