Tras la polémica en los debates, el presidente del órgano legislativo, Nabih Berri, convocó para la tarde de este viernes el análisis presupuestario, una de las leyes relacionadas al acuerdo final con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para su aporte a la implementación de las reformas de recuperación.
En la jornada anterior, la diputada Ghada Ayoub enfatizó que el proyecto de presupuesto fue diseñado solo para satisfacer al FMI, mientras la nación necesita de un plan integral para detener la destrucción del sector público.
A través de su cuenta en Twitter, el parlamentario Hassan Murad pidió detener el despilfarro y proteger el dinero de los depositantes e insistió en la urgencia de dejar de repetir palabras y promesas vacías.
En este sentido, el diputado Elías Jarada subrayó que «debimos haber discutido el presupuesto del 2023, no de este año» y destacó la importancia de desarrollar un plan económico real y detener la migración de la juventud libanesa.
Por su parte, el jefe del bloque Lealtad a la Resistencia, Muhammad Raad, agregó que la discusión del plan de gastos requiere enfrentar los dilemas crónicos del país, tales como electricidad, finanzas, corrupción y el sistema bancario.
El legislador Raad convocó a ser firmes ante la arrogante agresión israelí de aplastar a todos los pueblos e insistió que la actual etapa requiere una dosis de flexibilidad de quienes están involucrados en el manejo de los asuntos del país para aliviar el sufrimiento de los ciudadanos.
De acuerdo con analistas, la no formación de un gobierno tras la reelección de Najib Miqati como primer ministro desde junio último, la fragmentación en el Parlamento, la paralización del sector público debido a la huelga de los empleados y el agravamiento de las condiciones de vida complejizan el escenario político libanés.
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