Para el secretario nacional del Partido Comunista Francés, Fabien Roussel, se trata de una catástrofe, que debería conducir al resurgimiento de la izquierda en Europa y ratifica la urgencia de reconstruir una fuerza popular y progresista.
Casi 100 años día por día después de la llegada al poder de (Benito) Mussolini, la derecha fascista italiana está a punto de ganar las elecciones, escribió Roussel en su cuenta en Twitter.
Por su parte, la diputada por La Francia Insumisa Clémentine Autain calificó en la propia red social de trágico que “los herederos de Mussolini tomen el poder en Italia», lo cual atribuyó a las políticas neoliberales y a la desaparición de la izquierda, así como manifestó solidaridad con los progresistas italianos.
Para el eurodiputado Yannick Jadot, excandidato a los comicios presidenciales de este año por los ecologistas, los resultados electorales en el vecino país llaman a convencer a las personas de que otro proyecto de civilización es posible.
“Terrible victoria pos-fascista en Italia. Polonia, Hungría, Suecia y ahora Italia (…)”, señaló Jadot.
En los micrófonos de BFM TV, la primera ministra de Francia, Elisabeth Borne, consideró que “no deben quemarse etapas” y descartó comentar sobre las decisiones democráticas del pueblo italiano.
Sin embargo, advirtió que el país estará atento junto a la Comisión Europea a ciertos valores como los derechos humanos y el aborto, y en particular al respeto a los mismos.
Anoche, la líder de la extrema derecha Giorgia Meloni se declaró ganadora de las elecciones, escenario que la pondría a las puertas de convertirla en la primera mujer en el cargo de primera ministra de Italia.
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