En estos momentos delicados de la historia de la humanidad, pedimos a la ONU que tome la decisión correcta para establecer un orden mundial en el que todos actúen bajo el paraguas de los principios y objetivos de la Carta de Naciones Unidas, dijo el Canciller en su discurso ante el 77 periodo de sesiones de la Asamblea General.
Aclaró que Siria procedió a esta convocatoria partiendo de una experiencia real y es que la guerra impuesta desde 2011 contra esta nación formó parte de los intentos de Occidente por mantener su dominio y hegemonía sobre el mundo.
Un nuevo orden es una necesidad urgente, ya que el actual unipolar sólo generó guerras, conflictos y amenazas a la paz y la seguridad internacionales, además de agravar el terrorismo y el caos, y agravar la economía mundial y la seguridad alimentaria, asevero.
Según el jefe de la diplomacia, es momento de que algunos países occidentales se percaten que las potencias son grandes no con su brutalidad y poderío militar, sino también por su respeto a la Carta y el derecho internacional, y su defensa de los principios humanitarios y evitando el egoísmo y la mentalidad del colonialismo.
Queremos un mundo en el que ningún país puede lograr sus intereses y seguridad a expensas de los intereses y la seguridad de los demás, concluyó.
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