De acuerdo con la fuente, el servicio para rastrear el movimiento de embarcaciones mostró que el barco de guerra sueco ingresó dos veces al área cerca de las tuberías, donde pronto se descubrieron fugas.
Al mismo tiempo, la Marina del país escandinavo indicó que se llevó a cabo «vigilancia marítima» en estas áreas, cuyos propósitos no fueron nombrados.
El informe señala que la noche de las explosiones, la nave sueca no estaba en la zona.
A finales de septiembre se detectó una fuga de gas en cuatro lugares de los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 en el mar Báltico, cerca de la isla danesa de Bornholm.
El pasado fin de semana, según Dinamarca, se detuvieron las fugas de gas de ambos gasoductos.
Las autoridades danesas, suecas y rusas investigan el incidente: el Servicio de Seguridad del Estado de Suecia lo trata provisionalmente como un sabotaje, mientras el Servicio Federal de Seguridad de Rusia los considera terrorismo internacional.
Durante esta jornada, la compañía Gazprom informó que tras las rupturas, la presión en los gasoductos se había estabilizado y las fugas se habían detenido. La empresa rusa comenzó a bombear gas de la cadena Nord Stream 2 no dañada para verificar su integridad.
La semana pasada, la vocera de la Cancillería rusa, Maria Zajárova, anunció que Rusia convocó una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar el posible sabotaje al sistema de gasoductos Nord Stream.
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