Frente a los 500 millones de euros asignados en 2022, el ejecutivo planea una rebaja de 176 millones de cara al próximo año, lo cual dejaría una cantidad cercana a la presupuestada en 2016, si bien en ese momento se presentaron 85 mil solicitudes de asilo, frente a las 135 mil que se esperan en 2023.
De acuerdo al informe dado a conocer, el Ministerio del Interior prevé un endurecimiento de los plazos de investigación y un refuerzo de la lucha contra el fraude, en relación con el “proyecto presupuestario” dedicado al asilo y la inmigración, como forma de reducirlo un 36 por ciento en comparación con la ley de financiación de 2022.
Con respecto a los casi 100 mil desplazados ucranianos acogidos en Francia desde el mes de marzo, perceptores de la ADA, el documento señaló que “dadas las incertidumbres que rodean el conflicto y la evolución de los flujos, no se presenta aquí la correspondiente previsión de gastos para 2023”.
De acuerdo a la Oficina Francesa de Inmigración e Integración, que paga esta ayuda, solo el colectivo de ciudadanos ucranianos recibe mensualmente 27 millones de euros, una cifra que excede en 10 millones de euros el presupuesto anual proyectado para todos los solicitantes.
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