De acuerdo con la disposición gubernamental, de esa forma se deroga el arreglo que daba a los portadores de los mencionados pasaportes la posibilidad de permanecer en esta nación por espacio de 90 días y de ingresar a territorio nacional en un plazo de 180.
La restricción se pondrá en funcionamiento a partir del 20 de este mes para los tenedores de pasaportes de servicio, aunque para los diplomáticos la limitación ya funciona desde el pasado 25 de febrero, aclaró el servicio de prensa del ejecutivo.
Con anterioridad, el gobierno búlgaro dispuso la limitación de las preferencias para la entrega de visados a turistas rusos y aumentó a 90 euros la tarifa para gestión urgente de los documentos.
Bulgaria participa, junto a otras potencias occidentales, en una guerra económica impuesta a Rusia, después que su presidente Vladimir Putin anunció el inicio de una operación bélica para desmilitarizar y desnazificar a Ucrania.
Las presiones a Moscú incluyeron un boicot diplomático, que contempló la expulsión de diplomáticos rusos de varias capitales europeas.
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