Tal documento de la iniciativa Hadhreen, la cual viabiliza el tratamiento médico a los movilizados que fueron lesionados, precisó que más de la mitad de los occisos tenían entre 18 y 25 años, en tanto otro 16 por ciento contaba con menos de 18 años.
En cuanto a los heridos, el documento precisó que una cifra superior a los 400 no rebasaban los 18 años de edad.
La organización admitió que el número de fallecidos y de heridos puede ser mayor, ya que varios casos pudieron no ser documentados.
Como muestras de la fuerte violencia ejercida por los uniformados, Hadreen señaló que nueve de las víctimas sufrieron diversos grados de parálisis permanente y otras 14 necesitaron amputaciones parciales o completas de sus miembros.
Tras el golpe de estado militar hace ya casi un año, el cual sucedió a otro el 11 de abril de 2019 que apartó del poder al entonces presidente Omar Hassán al-Bashir, la actual gobernante junta militar y los grupos prodemocráticos mantienen un impasse político.
En medio de reiteradas protestas populares, los inconformes exigieron en Jartum, capital del país, y otras ciudades, el retorno de un gobierno civil, con el abandono de los militares del poder y con ello el fin del período de transición mediante elecciones.
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