El cortometraje, de las realizadoras cubanas Iriana Pupo y Yaimi Ravelo, cuenta en 30 minutos la historia de Natali, una niña de cinco años que sufre una enfermedad contra la cual lucha.
Durante toda la proyección el espectador se percata de que solo la dedicación de los médicos y el amor de su familia constituyen la fuerza para enfrentar el difícil proceso que enfrenta la niña en medio del recrudecimiento del férreo cerco económico al que está sometido su país.
Presentamos uno entre tantos casos de familias que sufren directamente el daño de un bloqueo que tiene más de seis décadas, expresó a Prensa Latina la fotorreportera Yaimi Ravelo.
Y se trata de eso, una gota en esa lluvia de dificultades que vivimos los cubanos bajo esta política de asfixia y cómo, pese a todo, se logra salir adelante, subrayó Ravelo, integrante del colectivo de la corresponsalía en La Habana del periódico argentino Resumen Latinoamericano.
Comentó que el título del audiovisual se lo deben a la protagonista, porque Natali tiene entre sus canciones infantiles favoritas Gotica de agua y además es “en honor a la esperanza, lo que representa la pureza” de ese líquido vital.
El equipo de realización lo integraron también el reconocido artista de la plástica Nelson Domínguez, quien hizo la ilustración del cartel promocional de La gota…, y Graciela Ramírez, editora jefa de Resumen en La Habana, productora del filme.
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