Al intervenir en el segmento de alto nivel del foro que acoge este balneario egipcio, advirtió que las crisis imperantes pudieran conducir a pensar que son otras las prioridades, pero “la emergencia climática está ahí, y no es para mañana”.
En su discurso, el mandatario insistió en la importancia de salir del carbón y de apoyar a los países con economías emergentes a hacerlo, entre los que citó a Sudáfrica, India, Senegal e Indonesia.
De acuerdo con Macron, el clima y la biodiversidad deben verse como dos caras de la misma moneda, considerando que las naciones con reservas notables de diversidad biológica lo son también de sumideros de carbono, los cuales calificó de absolutamente invaluables, y necesitan ayuda.
Al respecto, subrayó la importancia de proteger a las turberas y los manglares, por su papel en la absorción del dióxido de carbono.
El presidente de Francia reconoció en su discurso que el combate contra el cambio climático requiere el acompañamiento a los países pobres y de renta media, y pidió no esperar a la próxima COP para avanzar en esa dirección.
Debemos llegar hasta el éxito de la solidaridad financiera, en aras de ayudarlos a enfrentar el cambio climático y a adaptarse a sus consecuencias, expuso.
En otro momento de su intervención, el jefe de Estado galo reiteró el respaldo de Francia a la prohibición de explotar los grandes fondos marinos.
Al igual que otros líderes occidentales, Macron utilizó la tribuna de la COP27 en Sharm El Sheikh para atacar a Rusia por el conflicto en Ucrania.
A propósito de su presencia en el foro y de su discurso sobre otras naciones y la conducta ante el cambio climático, la organización Greenpeace Francia afirmó hoy que París carece de moral para dar lecciones en el tema.
El portavoz de Greenpeace Francia, Clément Sénéchal, cuestionó al mandatario, recordando que Francia incumple los objetivos del Acuerdo de París, alcanzado durante la COP21 en 2015.
Según declaró el vocero a la cadena Franceinfo, el gobierno va muy lento en la meta de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y fijó un presupuesto para el 2023 “dos veces más desfavorable para el medioambiente que el precedente”.
Macron cumple en Sharm El Sheikh una intensa agenda paralela a la COP27, que incluyó hasta el momento su primera reunión con el primer ministro británico, Rishi Sunak, y un encuentro con jóvenes activistas climáticos de diversas partes del mundo.
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