La exhibición Lives of the Gods: Divinity in Maya Art (Las vidas de los dioses: la divinidad en el arte maya) abarca piezas provenientes de México, Guatemala y Honduras, que van desde objetos raramente vistos hasta otros descubiertos en fechas muy recientes.
Además, pretende explorar la relación que tenían los mayas con sus divinidades, indicó su curador, Oswaldo Chinchilla.
Según dijo a la prensa el académico guatemalteco, las deidades pintadas o talladas en las obras podían ser terroríficas, pero también podían ser tiernas.
El MET fue uno de los primeros museos en crear un ala especial para el arte prehispánico y esta exhibición refleja la creciente tendencia a su “aprecio como manifestación artística a la par que el arte europeo”, recalcó.
La muestra está dividida en varias secciones: Creaciones (enfocada en episodios mitológicos relacionados con el origen del mundo), Día, Noche, Lluvia, Maíz, Conocimiento y, por último, Dioses patronos, con obras que muestran a reyes y reinas adoptando atributos de los dioses.
Esculturas de piedra, enormes piezas provenientes de monumentos funerarios y pequeños objetos como platos de cerámica, cuencos y diminutas figuras talladas conforman la primera gran exposición de arte maya en Estados Unidos en una década, la cual reúne casi 100 obras del periodo clásico (del 250 al 900 d.C.).
De acuerdo con la comisaria de arte americano antiguo del MET, Joanne Pillsbury, existe la seductora sugerencia de que para los mayas clásicos el proceso creativo era, al menos en parte, también un proceso divino.
La mayoría de las piezas que serán exhibidas en el museo neoyorquino fueron descubiertas en los bosques tropicales donde antes estaban ubicadas antiguas ciudades centroamericanas como Tikal, Yaxchilan o Piedras Negras.
Después de su presentación en el MET, la exposición será trasladada al Kimbell Art Museum, en Texas.
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