Nuestro objetivo común debe ser ayudar a que la economía británica deje de depender de la inmigración, y comenzar a invertir más en el entrenamiento de los trabajadores que tenemos aquí, tiene previsto decir Starmer en la reunión anual de la Confederación de Industrias Británicas (CBI), según extractos del discurso adelantados por su oficina.
El actual líder de la oposición parlamentaria asegurará, no obstante, que de derrotar a los conservadores en los comicios de 2025, su partido será pragmático, y no ignorará la necesidad de contratar personal extranjero calificado para suplir la escasez de fuerza de trabajo.
En ese sentido, abogará por un sistema de inmigración basado en un sistema de puntuación similar al implantado por los conservadores, pero que funcione para los trabajadores y empresarios británicos.
Advertirá, sin embargo, que un eventual gobierno laborista no restablecerá el libre movimiento de personas abolido tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea en 2020.
El discurso de Starmer será un día después del pronunciado por el primer ministro Rishi Sunak en la inauguración de la conferencia anual de la CBI en la ciudad inglesa de Birmingham.
En su intervención, Sunak dijo que uno de los principales beneficios del Brexit fue que permitió al Reino Unido recuperar el control de sus fronteras, y que frenar la inmigración ilegal era una prioridad para su Gobierno.
Las declaraciones del gobernante conservador contrastaron con las del director general de la CBI, Tony Danker, quien aseguró al auditorio que se necesitan más trabajadores extranjeros para hacer crecer la economía en momentos en que el país se encuentra en recesión.
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