En su cuenta en Twitter el canciller apuntó que establecer dicha conexión entre la Florida y la nación caribeña sería un paso positivo para ambos países y ampliaría el acceso de los cubanos a la red de redes.
El pasado 1 de diciembre el Departamento de Justicia recomendó a la Comisión Federal de Comunicaciones negar un permiso para que la isla se enlace al cable submarino que interconecta al Caribe con el continente, bajo el argumento de un supuesto peligro para la seguridad estadounidense.
Tal actitud entra en conflicto con las declaraciones del propio presidente norteamericano, Joseph Biden, quien prometió ampliar las posibilidades de acceso a la red de redes para Cuba.
Pese a ello, la nación caribeña no detiene sus esfuerzos para facilitar el servicio a la población, dijo la ministra de Comunicaciones, Mayra Arevich, durante la recién concluida sesión ordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento).
Más de 7,5 millones de personas acceden a internet desde la isla, a pesar de las limitaciones impuestas por el bloqueo económico de Estados Unidos, apuntó la titular y precisó que la principal vía de conexión es la telefonía móvil (6,3 millones en cuatro años).
El pasado 9 de diciembre Cuba también anunció la instalación del nuevo cable submarino Arimao, que la unirá con Martinica, como parte de un acuerdo entre la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (Etecsa) y la compañía francesa Orange S.A.
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