Agencia de Seguridad Nacional de Iraq informó que las nuevas pesquisas están relacionadas con la detención de nueve altos mandos, incluidos oficiales de la policía de protección, involucrados en el contrabando del crudo y sus derivados, en cantidades estimadas en 75 millones de litros mensuales.
Según la fuente, las investigaciones aún están en curso con los 49 acusados, incluidos oficiales, asociados, comerciantes y contrabandistas.
El proceso se realizó en tres etapas, a través de los oficiales y el coordinador, quienes tenían la tarea de proteger a los traficantes al retirar el crudo y asegurar el movimiento de las embarcaciones.
El delegado involucrado emitió circulares facilitando el transporte de las cisternas, mientras que los contrabandistas debían entregar el dinero luego de la venta al representante, quien lo repartía entre los involucrados y se estima que las ganancias estaban en el orden de los 320 mil dólares diarios.
De acuerdo con las investigaciones, el hidrocarburo fue extraído de un oleoducto a cinco kilómetros de la carretera internacional y las operaciones de donde se sustraía entre 20 y 30 tanques diarios, sólo se realizaron durante la noche.
El proceso de robo continuó durante un mes entero, luego la misma fuerza involucrada en el contrabando denunció la violación y lo cerró, para después continuar en un nuevo lugar.
Rumores no confirmados hablan de que las redes de contrabando incluyen partidos políticos influyentes y figuras que generalmente administran las operaciones entre bastidores contratando y transfiriendo oficiales superiores a áreas designadas.
Reportes indican que las operaciones de robo de petróleo han estado en curso durante años en la mayoría de las provincias iraquíes, como Kirkuk, Diyala y Nineveh.
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